El término «buen samaritano» proviene de una parábola bíblica. La historia trata sobre un hombre al que llaman samaritano (residente de Samaria), que se detuvo a ayudar a un hombre que había sido asaltado y herido, mientras que incluso el sacerdote y el levita pasaban de largo y simplemente lo ignoraban. Básicamente, nos enseña una lección sobre cómo debemos «amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos».
La Ley del Buen Samaritano de Texas protege a los buenos samaritanos de costosas demandas por negligencia en caso de haber brindado asistencia de emergencia a otra persona involucrada en una emergencia. Esta ley también promueve una disposición general de ayuda entre los ciudadanos para cuidar y protegerse mutuamente de daños mayores.
Los buenos samaritanos tienen las mejores intenciones al responder ante un accidente o una emergencia. Desafortunadamente, en situaciones de alto riesgo y alta presión, estas personas pueden cometer errores debido a la confusión, el pánico y la mentalidad de supervivencia. La Ley del Buen Samaritano las protege cuando cometen estos desafortunados errores.
La Ley del Buen Samaritano se aplica a civiles, personal de primera respuesta y personal médico sin licencia que actúa de buena fe.
La Ley del Buen Samaritano no protege a los individuos cuyo único motivo fue ayudar a alguien con la intención de recibir una recompensa.
Los accidentes de tráfico son un ejemplo común. Un transeúnte en el lugar del accidente podría intentar ayudar al conductor sacándolo de un vehículo destrozado y lesionarlo al hacerlo.
Desafortunadamente, no es inusual sufrir lesiones adicionales durante este proceso. Sin la ley del Buen Samaritano, el conductor podría demandar al buen samaritano por lesiones adicionales o negligencia, incluso si la persona solo intentaba ayudar.
Otro ejemplo podría ser el de un conductor lesionado en un accidente automovilístico que acusa a un buen samaritano de causarle la lesión. Esto puede ocurrir cuando necesita culpar a alguien para obtener una indemnización por sus lesiones, incluso siendo plenamente consciente de que el accidente es su culpa.
Excepciones de la Ley del Buen Samaritano de Texas
Conducta intencional o temeraria
Esta protección no se aplica si la persona fue negligente o imprudente al ofrecer ayuda en cualquier tipo de situación de emergencia.
Expectativa de remuneración
Esta protección no se aplica si la persona o el profesional médico ofreció un servicio mientras esperaba recibir un pago o solicitó negocios en el lugar de la emergencia.
Profesionales médicos
Esta protección no se aplica a una persona que trabaja en la industria del cuidado, el hospital o la sala de emergencias.
Incluido un médico tratante o un médico que admita a un paciente con un reclamo por responsabilidad sanitaria.
Causa del daño:
Esta protección no se extiende a la persona responsable de causar una emergencia. Por ejemplo, si un conductor colisiona con otro vehículo y luego le presta auxilio, aún podría ser considerado responsable de los daños resultantes de prestarle auxilio.
Llamada de un buen samaritano al 911
Una llamada fraudulenta o engañosa a la policía puede potencialmente llevar a una persona a tener responsabilidad civil.
Ley del Buen Samaritano para la RCP
Una persona puede enfrentar responsabilidad si realizó RCP de emergencia innecesaria a la víctima.



